Sí, la bondad es un hábito. Y puede ser cultivada. Haz la prueba: concéntrate en la bondad todos los días durante un mes y verás cambios profundos en tu vida. Te sentirás mejor contigo mismo como persona. Verás como la gente reacciona contigo de manera diferente y te tratan mejor, incluso a largo plazo. Es el Karma.
Todos los días me doy cuenta todo lo que un poco de amabilidad puede cambiar la vida de los demás. Confío en la humanidad de la gente, pero creo que todos debemos trabajar para traer de nuevo la bondad a nuestra sociedad moderna.
No estoy segura de si nuestra bondad ha empeorado en los últimos tiempos. Pero si lo ha hecho, sospecho que el cambio no está en la gente. Pienso que el problema es el individualismo, la pérdida de un sentido de comunidad. Creo que no nos reunimos lo suficiente, y estamos separados entre nosotros de muchas maneras.
Independientemente de si ahora hay más bondad o menos entre las personas, no quiero dejarme arrastrar por la ingratitud y el individualismo. Es por ello por lo que he decidido este mes trabajar como hábito la bondad.
¿Cómo desarrollar el hábito bondad? Os dejo algunos consejos prácticos que he recapitulado para trabajar mi hábito de este mes.
Tabla de contenidos
10 Consejos prácticos para practicar la bondad
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Planteárselo como meta cada día. Al comienzo de cada día, plantearse una meta concreta que te haga ser bondadoso con otra persona o personas y luego hacerlo a lo largo del día. Puedes programar un recordatorio con Google Calendar o cualquier otra aplicación o truco.
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Ser amable. En caso de duda, sigue este consejo. Por supuesto hay momentos en los que otras personas no quieren a alguien que actúe amablemente con ellos. Pero por lo general a todo el mundo le gusta sentirse bien tratado.
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Ayudar a los demás. Este es probablemente uno de los puntos débiles de nuestra sociedad. Bueno en realidad hay muchas personas que son muy generosas con los demás. Pero en general, hay una tendencia a pensar sólo en un mismo y hacer caso omiso de los problemas de los demás. No debemos mirar para otro lado ante las necesidades y problemas de los demás. Debemos intentar ayudar incluso antes de que nos lo pidan.
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Practicar la empatía. Que sea un hábito el tratar de ponerte en los zapatos de otra persona. Da igual la persona: tus seres queridos, compañeros de trabajo, gente de la calle… cualquier persona. Realmente trata de comprender lo que se siente al ser ellos, lo que ellos están pasando y por qué hacen lo que hacen.
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¿Cómo te gustaría ser tratado? No significa tratar a alguien exactamente como te gustaría que te tratasen a ti. Más bien tratar de imaginar cómo quieren ser tratados, y hacerlo así.
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Escuchar a los demás. Otra debilidad: todos queremos hablar, pero muy pocos de nosotros queremos escuchar. Y, sin embargo, todos queremos ser escuchados. Así que tómate un tiempo para escuchar realmente a la otra persona, en lugar de simplemente esperar tu turno para hablar. Esto también ayuda a entender mejor a los demás.
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No juzgar. Todos tenemos tenemos tendencia a hacer juicios, es la naturaleza humana, supongo. Pero debemos tratar de ver a cada persona como un ser humano individual, con diferentes pasados, necesidades y sueños.
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No criticar. Todos tendemos una tendencia a criticar a los demás, tanto si se trata de personas que conocemos o gente desconocida -famosos, políticos… Sin embargo, pregúntate si te gustaría ser criticado en la situación de esa persona. La respuesta es casi siempre “no”. Así que evitemos la crítica, y en lugar de ella, aprendamos a interactuar con los demás de una manera positiva y asertiva.
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Practicar la compasión. Una vez de que puedas comprender a la otra persona, y sentir por lo que está pasando, y por qué actúa así, querrás poner fin a su sufrimiento. Y cuando se pueda, inicia incluso una pequeña acción para aliviar de alguna manera su sufrimiento.
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Ser el cambio. El famoso Gandhi nos dijo que seamos el cambio que queremos ver en el mundo. Bueno, a menudo pensamos que esa cita se aplica a grandes cambios, como la pobreza, el racismo y la violencia. Cierto, sí se aplica a esas cosas … pero también se aplica a una escala mucho más pequeña: a todas las pequeñas interacciones entre las personas. ¿Quieres que la gente se trate con más compasión y bondad? Empieza por ti. Incluso si el mundo no cambia, al menos lo has intentado.
Por suerte me encuentro con gente todos los días que es amable y bondadosa conmigo. Y yo trato de, humildemente, practicar la bondad a diario. Y este mes voy a hacer hincapié en ello.
Otros hábitos que me he propuesto
Éstos son otros hábitos que me he propuesto en otros meses:
En 2015
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Marzo: alimentación saludable
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Abril: mantener la casa ordenada
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Mayo: estar activo
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Julio: no procrastinar
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Agosto: el hábito de la gratitud
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Septiembre: no preocuparme
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Noviembre: conducir despacio
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Diciembre: atención plena
En 2014
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Enero: Hacer ejercicio.
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Febrero:Las tres cosas mejores del día.
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Abril:Levantarse temprano.
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Junio: Leer más.
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Julio: Meditar a diario.
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Agosto: Escribir cada día a un amigo.
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Septiembre: Tres piropos al día.
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Octubre: Dormir lo suficiente.
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Noviembre: Planificar.
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Diciembre: Comer menos.
Foto por Jennuine Captures