Hace unos días visité a una gran amiga. Vive a poco más de 125 kilómetros de distancia, y sin embargo llevábamos más de dos años sin vernos. Realmente es una persona a la quiero y admiro. El el viaje de vuelta estuve reflexionando sobre ello. Para mí, y supongo que para la mayoría de vosotros, dedicar tiempo a las personas que más queremos está dentro de lo más importante. Entonces…¿por qué había pasado tantos meses sin visitarla?
Llegué a la conclusión de que, aunque no se puede visitar a todo ser querido con la frecuencia que quisiéramos, sí se pueden tomar acciones para tener más contacto. Y desde entonces estoy tomando esas acciones.
Una de las cosas que me he propuesto es tomar el hábito de escribir cada día a un amigo o familiar. Siempre me prometo a mi misma escribir a ciertas personas. Pero las promesas no son suficientes, hay que prometer menos y hacer más.
¿Por qué tomar el hábito de escribir todos los días a alguien?
Muchos son los motivos. Quizás los porqués principales son:
- Porque para mí lo más importante son las personas, por encima de todo. Soy bastante social, se me cae la casa encima cuando estoy sola. El cariño y el amor por la gente para mí es mi leitmotiv.
- Porque quiero mantener el contacto con estas personas. Tengo muchos amigos y familiares a muchos kilómetros. A pesar de que mantenemos el contacto vía Whatsapp o Facebook, me gustaría saber más de sus vidas y que ellos sepan de la mía.
- Porque quiero mejorar mis técnicas de escritura. Los bebés aprenden a andar andando. Igualmente aprender a escribir se aprende escribiendo.
¿A quién voy a escribir?
- A amigos que hace tiempo que no veo pero me acuerdo mucho de ellos.
- A familiares que tengo lejos y que les quiero un montón.
- A amigos cercanos a los que quiera contarles algo que me cueste decirles en persona.
- A personas conocidas que me resultan interesantes y que me gustaría entablar una amistad.
- A gente a la que admiro y quiero aprender de ella.
Si recibes un email mío estos días, ya sabes que estás dentro de estos grupos. 😉
¿Cómo lo voy a hacer?
- Por la mañana temprano. Escribir va a ser una de mis tres Tareas Más Importantes del día.
- Será la primera cosa que haga cuando me siente en el ordenador por la mañana.
- Con el medio de contacto más idóneo para la persona a la que me dirijo. No voy a escribir un email a alguien que apenas consulta su correo electrónico, ni una carta postal a quién está siempre mudándose.
- Tener la persona a la que voy escribir ya pensada. Esto me ayudará a no distraerme por la mañana, directamente ponerme a escribir. La pensaré la noche de antes, cuando programe las TMIs del día siguiente, o al final de la semana, cuando escriba mis Grandes Rocas para esa semana.
7 Pasos para crear el hábito de escribir
- Comprométete públicamente. Para formar un hábito hay que estar totalmente comprometido. De nada sirven los “me gustaría” o “voy a intentar”. Por por escrito tu compromiso, detallado de cuándo y cómo lo vas a hacer, y díselo a todo el mundo.
- Hazlo todos los días a la misma hora, con un disparador. Un disparador es algo que te recuerda que debes ponerte a escribir. En mi caso, después de desayunar me pongo siempre en el ordenador a hacer mis TMIs. Éste va a ser el momento en el que sé que tengo que escribir. Busca tu momento, si es posible a primera hora del día. Así no tendrás excusas para no hacerlo. Y reserva ese momento sólo para eso.
- Pon atención plena en el nuevo hábito durante un mes. No intentes cambiar muchos hábitos a la vez. Enfócate este mes en este nuevo hábito. Tómatelo como el proyecto del mes, algo importante que debes hacer sí o sí. Cuando ya sea un hábito en tu vida, no necesitará tanta atención. Elimina distracciones, céntrate sólo en escribir.
- Empieza con poco. Este paso es esencial a la hora de implantar un hábito en tu vida. Si te propones escribir 2000 palabras por día, es posible que al segundo o tercer día dejes de hacerlo. Empieza con poco, pero hazlo.
- Encuentra tus motivaciones. ¿Cuáles son sus razones para hacer esto? ¿Qué te motiva a sentarse y escribir? ¿Qué va a mantener la motivación cuando no tengas ganas de escribir? Yo ya he contado mis porqués. ¿Cuáles son los tuyos?
- Establece recompensas. Las recompensas son grandes motivadores. Hazlas más a menudo al principio: darse una pequeña recompensa después del primer día, y el segundo y el tercero, después de una semana, luego dos semanas, luego tres, y finalmente después de un mes. Haz una lista de estas recompensas antes de empezar, así puedes seguir adelante para conseguirlas.
- Haz que sea divertido. Por encima de todo, si el hábito no es divertido, de alguna manera, perderás la motivación a lo largo del tiempo. Una cosa es tratar de ser «disciplinados», pero al final, es la motivación lo que importa. No se puede forzar la motivación. Así que encuentra una manera de hacerlo más divertido, ya sea poniendo buena música mientras escribes, o tomando una taza de té o café mientras lo haces.
Hábitos del resto de meses de 2014
Este post forma parte de una serie de entradas en las que cuento qué hábitos me he propuesto implementar en mi vida cada mes. Éstos son los hábitos del resto de meses:
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12 meses, 12 hábitos. Enero: hacer ejercicio
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12 meses, 12 hábitos. Febrero: las tres cosas mejores del día
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12 meses, 12 hábitos. Marzo: tomar consciencia de mi postura corporal
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12 meses, 12 hábitos. Abril: levantarse temprano
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12 meses, 12 hábitos. Mayo: escuchar música a diario
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12 meses, 12 hábitos. Junio: leer más
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12 meses, 12 hábitos. Julio: meditar a diario
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12 meses, 12 hábitos. Septiembre: tres piropos al día
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12 meses, 12 hábitos. Octubre: dormir lo suficiente
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12 meses, 12 hábitos. Noviembre: Planificar
- 12 meses, 12 hábitos. Diciembre: Comer menos